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Se formó comité para salvaguardar el tejido tradicional del sombrero de Panamá

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El sombrero de Montecristi erróneamente conocido como Sombrero de Panamá es tejido por manos ecuatorianas. Montecristi es la ciudad donde se encuentran estos sombreros artesanales. Los tejedores se demoran entre 1 a 6 meses en tejer un sombrero. Todo depende del grado de complejidad para elaborar un sombrero, que termina convirtiéndose en una pieza única de elegancia y confort. El tejido del sombrero puede variar según su grado de finura. Mientras más fino sea el tejido, el precio será más elevado. Un sombrero de Montecristi está entre los $50 hasta los $800. Un sombrero fino es capaz de poder doblarse y volver a su forma de origen, esto es posible debido a sus micros trenzas que está entrelazadas cuidadosamente para darles ese acabado perfecto.

El sombrero de Panamá en  el año 2012 fue declarado patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. En la actualidad se ha formado un comité para salvaguardar el tejido tradicional de este sombrero. Con el fin de cuidar y preservar el conocimiento del tejido. Esta sabiduría ancestral, de la que se tiene vestigios desde antes de la colonización española, forma parte de la tradición de un pueblo que  aún continua esta labor a pesar de los profundos cambios históricos que se han producido en el territorio.

Panama hat weaving

El INPC (Instituto Nacional de Patrimonio Cultural)  junto a siete ministerios, son parte del comité, el Ministerio de Cultura y Patrimonio; Turismo; Industrias y Productividad; Agricultura; Acuacultura y Pesca; Ganadería; Comercio Exterior; Inclusión Económica y Social. Este comité Interinstitucional de Salvaguarda del Tejido Tradicional del Sombrero de Paja Toquilla firmará un acuerdo donde se comprometen a cuidar el saber del tejido y  además de salvaguardar el tejido del sombrero, se reconocerá y valorará el trabajo de los tejedores. A las personas que portan esta herencia de conocimiento, tanto personas mayores como las nuevas generaciones que están aprendiendo. 

El comité cumplirá funciones para implementar el Plan de Salvaguardia. Las funciones se basan en  Coordinar, articular y formular políticas y acciones destinadas a la protección del sombrero. De esta manera el sombrero de Paja Toquilla tendrá más garantías. También se conocerá más en mercados internacionales. Las mesas territoriales de Manabí, Guayas, Santa Elena, Cañar, Azuay y Morona Santiago también se unen para desarrollar el plan de salvaguardia del tejido de sombrero de Montecristi.

Toda esta gestión a nivel político y social se suma como referente de unidad para cuidar el patrimonio vivo del sombrero de paja toquilla, pues es necesario mencionar que en los últimos años previo a este comité, los artesanos se han visto en disminución, pues las nuevas generaciones no ven rentable económicamente la elaboración de sombreros, ya que no tienen un mercado fijo que los sustente, y que son pocos los artesanos que logran vivir únicamente de la venta de sombreros de paja toquilla. Esa es la meta de poder lograr un comercio justo para nuestros artesanos, aquellos que son los verdaderos artistas de este tejido, es nuestro deber dar a conocer que ellos son los protagonistas de nuestros sombrero, ellos tejen para llevar a ustedes el mejor producto y recibir a cambio el valor justo de su trabajo.

Conoce un poco más a nuestros tejedores

Los tejedores de Sombreros de Panamá disfrutan con esta labor, ellos están orgullosos del saber que han heredado, es un conocimiento propio de sus costumbres, de su historia. Ellos cuando mencionan la labor del tejido lo describen como la herencia de su linaje.  Conocer que es su trabajo es fundamental, pues no es un simple accesorio lo que elaboran, es su conocimiento materializado. Más que un trabajo, es una pasión para ellos.

Tejedora de sombrero de Panama

Mariana Mero (59 años); oriunda de Montecristi. Ella comenzó a tejer sombreros desde la infancia como la mayoría de los habitantes de Montecristi que se dedican al tejido. Su madre y su tía le enseñaron las técnicas para tejer un sombrero. Ella se dedica a tejer debido a que no siempre se obtienen ingresos de otra actividad económica. Su familia es de escasos recursos económicos. Los sombreros le dan sustento a su hogar en los últimos años.

"Yo tenía 10 años cuando empecé a tejer sombreros. Soy la mayor de 4 hermanos; mi madre no tenía para pagarnos el estudio a todos. Ella se sacrificaba largas horas de trabajo en el tejido fino del sombrero para llevarnos el alimento. Por esta razón pedí a ella que me enseñara a tejer los sombreros. De esta manera yo ayudaba con los gastos del hogar", dijo Mariana Mero.

Los sombreros tienen la particularidad que quien inicia el sombrero lo finaliza, así el tejido es homogéneo y se mantiene unánime de la copa hasta las alas. Aunque hay en casos específicos donde dos personas tejen un mismo sombrero. Normalmente eso no ocurre, suele ser una sola persona que teje una sola pieza de sombrero. El cuidado en los detalles es fundamental, los acabados del tejido y su textura son muy finos por ello el artesano cuida de todo en lo más mínimo.

Mariana trabajo duro tres semanas o más para cada sombrero. Se hace sobre un soporte para mantener el cuerpo en buena posición. De esta manera no afecta el pecho ni la columna. Sin embargo, ella dice que debido a este trabajo sufre de la columna, las largas horas en esa posición al pasar los años acumulas dolores lumbares, en la rodillas y los pies. La Oficina Reguladora del Sombrero tomará medidas de precaución para la salud de los tejedores. Esto incluye dar masajes en las partes afectadas. Igualmente dar limpieza bucal para cuidar sus dientes. Esto se lo hace con la finalidad de que los artesanos puedan trabajar satisfactoriamente.

“Parte del secreto de un buen acabado de sombrero es salpicar agua sombre el tejido cuando esté casi terminado. Esto suaviza la paja y no se rompen sus hebras. También se aprieta el tejido para que no se suelte, este trabajo es parte de mi vida, no lo cambiaría, aprecio mucho cada vez que se llevan un sombrero, y más si es a otra parte del mundo, siento que de a poco retoma valor el tejido", dijo Mariana.

Al igual que Mariana, existen muchas personas que tejen los Sombreros de Panamá. Muchas de estas personas fueron afectadas por el terremoto del 4/16. Ellos día a día se levantan después de esta tragedia. Tú puedes ayudar a incrementar sus trabajos, valora un tejido que lleva contigo un conocimiento ancestral y apoya el comercio justo.

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